Debemos apuntar, que la práctica de transferencias de energía para la sanación viene de tiempos muy remotos, de muchas culturas, por ejemplo como “Prana” para los hindúes, “Maná” para los kahunas, “Energía bioplásmica” para los investigadores rusos y “Chi” para los chinos.
Todos tenemos esta clase de “Energía Equilibrante y Sanadora” para ayudarnos a nosotros mismos como siendo practicantes al prójimo.
Es un sistema que sirve para armonizar, relajar, equilibrar y por ende lograr un mejor bienestar y salud en general.
También se reconoce en el Reiki, para el practicante como un camino filosófico de auto conocimiento y evolución interior.
La sanación espiritual sana al nivel más profundo, a través de hacernos conscientes de la unidad con la conciencia universal; mientras que la sanación energética, se centra en quitar los síntomas de los trastornos mentales y físicos.
El fenómeno de las enfermedades tiene un significado de gran importancia en el crecimiento espiritual como mensaje para que despertemos.
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