Cuando
entramos en el concepto de Maestros, Guias, Profetas, Gurús, etc., en todo lo
que se refiere a la espiritualidad, en el mundo en que vivimos, con tantos
problemas que nos atañen a nuestra persona y al círculo que nos rodea, es muy
fácil, ante la desesperación de nuestra situación encontrarnos en nuestro
andar, con personas (mejor expresado personajes) que nos inclinan a seguir sus
pasos y peor aún a estar ciegos ante
todo lo que nos rodea, algunas veces con la prohibición o convencimiento
de estos personajes para únicamente ver, oír, creer, “ciegamente” lo que dicho
“seudo-maestro” nos dice y así nos convence de su realidad o de su
conveniencia. Esto es muy grave para cada SER ya que su comportamiento, en esta
vida, no se les permite llegar a su Interior y hacer una vida acorde a la verdad
que la Realidad del SER posee que reside en nuestro propio CORAZÓN, sino un
mensaje externo a nuestro SER y eso es impropio a nuestra propia realidad.
“El Falso maestro” limita al
discípulo de todas o algunas de las formas de comunicación, con aquellos ajenos
a él. Libros, revistas, cartas, y vínculos con otras personas son tabú. El
procura el aislamiento.
“El Falso maestro” trata de que el
converso potencial sea convencido, más allá de toda duda, del elevado
propósito, del destino especial de su líder o grupo, a través de un profundo
encuentro/experiencia. Por ejemplo, a través de un supuesto milagro o palabra
profética de aquellos en el grupo.
“El Falso maestro” te plantea que el
objetivo explícito del discipulado o membrecía es producir cierta forma de
cambio, sea a nivel global, social, o personal, esta perfección sólo será
posible si uno permanece como discípulo o miembro. Afuera o separado de él esto
jamás ocurrirá.
El “Falso maestro” usa la poco
saludable práctica de exponer a los miembros del grupo, en reuniones públicas o
frente a terceros, para que admitan imperfecciones, opiniones sobre otros
miembros, chismes, e incluso, dudas sobre el grupo y pensamientos críticos
acerca de la integridad de los líderes.
“El Falso maestro” crea la
perspectiva de que él es el único poseedor de la verdad absoluta y que es
completamente capaz de explicarlo todo. Su doctrina no está sujeta a mejoras,
cambios o críticas. La conformidad absoluta con la doctrina, es lo fundamental,
generando frente a sus discípulos saber quienes fueron en otras vidas, para
hacerlos importantes, además de autoproclamarse también él y no comunicar que
no importa saber quienes fuimos en otras vidas sino que venimos a hacer en esta,
siempre aprendiendo, para lograr el objetivo de este peregrinar en este
espacio/tiempo que nos ha tocado vivir, logrando DESPERTAR y realizar la misión
de servicio y acción preestablecida para nuestro SER.
“El Falso maestro” trata de que los
discípulos piensen en parámetros estrechos y muy abstractos, propios de la
doctrina del grupo. Evita que se use el pensamiento crítico, reforzando una
mentalidad en “blanco y negro”. Los clichés y respuestas preparadas introducen
prejuicios mentales.
“El Falso maestro” promueve una
reinterpretación de la experiencia previa al grupo y dentro del grupo,
totalmente rígida y estructurada de acuerdo a la doctrina absoluta, incluso
cuando la experiencia contradice la doctrina. Es un sistema cerrado donde el
adepto tiene que reinterpretar diariamente o cada cierto tiempo, toda la
información recibida desde afuera, para acomodarla a la doctrina, que a ciegas
acepta de su “Maestro”.
“El Falso maestro” afirma que la
salvación sólo es posible a través de él o su doctrina, o dentro del grupo
en particular. Aquellos que lo abandonen están condenados, han caído o fallado.
Ahí el sentimiento de culpa hace que aún mas que la ceguera llegue a tu
CORAZÓN, como si encapsularas la verdad que allí reside.
“
El falso Maestro” tienes que buscarlo, adorarlo, obedecerlo, admirarlo, tener
una devoción hacia él/ella... eso es una realidad que exigen mucho porque es la
única capacidad que tienen para el dominio hacia sus discípulos ya que
DESPERTANDO verán en él lo que no es adecuado y se retirarán del camino que le
han obligado a transitar y se retiraran.
“Un
falso Maestro” siempre presume de sus cualidades o conocimientos, además se
pone como ejemplo de todo lo concerniente a su labor.
En
una época de cambios culturales, declive moral, inestabilidad familiar y caos
global como la nuestra, los grandes “Maestros espirituales” constituyen uno de
los recursos más preciosos de que dispone la humanidad para alumbrar un mundo
oscurecido. Lamentablemente, sin embargo, el hambre espiritual de nuestros
tiempos también ha favorecido la aparición de muchos “falsos profetas…” que
acaban dañando gravemente a sus seguidores. Es así como miles de bien
intencionados buscadores se ha visto arrastrado por “falsos Maestros” que
han acabado arruinando sus vidas. En los casos más extremos, sectas destructivas.
Es
importante, pues, aprender a distinguir entre los “verdaderos Maestros” y los “falsos
Maestros”, entre las comunidades espirituales realmente transformadoras y las
enfermas. Tanto el “falso profeta” como el “auténtico Maestro” socavan las
pautas habituales del EGO, pero éste alienta la liberación, mientras que aquél
promueve la esclavitud.
Los
“grandes Maestros” se manifiestan en una amplia variedad de formas diferentes.
Algunos son santos y puros, mientras que otros son más provocativos y los hay
tan normales y corrientes que apenas si podríamos distinguirlos de la multitud.
Es imposible, por tanto, esbozar un perfil ideal que nos sirva de modelo para
determinar los rasgos característicos que debe mostrar un auténtico “Maestro
espiritual”, como tampoco podemos delimitar un estilo de terapia que nos sirva
de modelo con el que cotejar todos los demás.
Resulta
inútil, por tanto, empeñarse en tratar de describir cómo debería comportarse un
buen Maestro, necesitamos de un tipo de análisis más sutil que se centre en lo
que ocurre entre Maestro y discípulo y en este sentido, existe una cuestión
importantísima como la que es un “verdadero Maestro” te hace llegar a tu
Interior para que llegue tu DESPERTAR y por lo tanto te hará LIBRE de
pensamiento y accionar, en cambio el falso nos conduce a todo lo contrario.
Antonio Fernández González
Reiki Master Galicia Lugo
Reiki Master Galicia Lugo
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